El verano me espera con suaves lluvias y varios grados bajo cero
Las playas son blancas y el agua está vacía.
La gente camina por la arena y por el agua.
Ahora veo, todos los sueños nos mienten.
Me calcino bajo el sol y al mismo tiempo me hago líquido
La lluvia tampoco deja que vea y disfrute del arco iris.
Desgracia tras desgracia. Algunos los llaman escalones.
Yo prefiero llamarlos sin metáforas; las desgracias son trampas, no escalones.
Escribo con pluma sobre chips y circuitos eléctricos.
En poco tiempo todo llega a ser oscuro, y ni siquiera cerré los ojos.